De vez en cuando se estrena una película que causa un impacto tan grande que por un tiempo marca la pauta del estilo de las futuras entregas del género cinematográfico al que pertenece como fue el caso de producciones como BLADE RUNNER, BATMAN, SEVEN y THE MATRIX. Un buen ejemplo de este fenómeno es SCREAM, película de 1996 que no solo fue el inicio de dos franquicias (sin este filme no hay SCARY MOVIE) sino que también por varios años muchas producciones trataron de simular su estilo (aunque no siempre funcionó). A pesar de que he vuelto a ver las entregas de SCARY MOVIE en varias ocasiones (todos tenemos un gusto culposo), han pasado muchos años desde la última vez que vi SCREAM así que decidí confirmar qué tan bien la ha tratado el paso del tiempo.
Esta es la historia de Sidney Prescott (Neve Campbell), una adolescente que un año después de la muerte de su madre es aterrorizada por un nuevo asesino. Este misterioso psicópata la ataca a ella y sus amigos usando películas de terror como parte de un juego mortal.
Esta película fue dirigida por Wes Craven, cineasta considerado como uno de los maestros del terror que no solo fue el creador de Freddy Krueger y de la saga de A NIGHTMARE ON ELM STREET, también ha dirigido otros clásicos del género como THE LAST HOUSE ON THE LEFT, THE HILLS HAVE EYES y SWAMP THING. El guion de este filme fue escrito por Kevin Williamson quien también trabajó en los guiones de películas como I KNOW WHAT YOU DID LAST SUMMER, THE FACULTY y CURSED, además de series de televisión como DAWSON’S CREEK, HIDDEN PALMS y THE VAMPIRE DIARIES.
No es una sorpresa decir que este filme está muy bien realizado y no solo me refiero a los aspectos más técnicos como la fotografía, efectos visuales, iluminación, montaje y demás, sino en la forma en que se utilizan todos estos detalles para crear un ambiente lleno de suspenso, intriga, terror y, a veces, hasta humor. Los creadores de esta película saben como mantener un ritmo dinámico hasta en las escenas que solo hay diálogos, pero hasta en estos momentos más tranquilos el espectador debe de mantenerse atento para detectar pistas, referencias a otras películas y de vez en cuando también se notará al supuesto asesino acechando a sus posibles víctimas en los lugares más inesperados.
Otro detalle que me llamó la atención al volver a ver este filme fue que este vez entendí las numerosas referencias a otras películas del géneros del cine slasher y terror y la cultura pop en general, hasta vemos la participación de ciertos actores que forman parte de otras famosas producciones pero en papeles secundarios. La trama en sí no ha sido afectada por el paso del tiempo y el misterio principal, es decir, la identidad del asesino y su motivación, cuenta con un giro muy interesante. Además, el ritmo con el que se desarrollan los eventos del filme logra muy buenas transiciones entre momentos de comedia, suspenso y terror.
En cuanto a al elenco hay que resaltar la actuación de Neve Campbell quien interpreta a Sidney Prescott como una joven inteligente, valiente y que aprende de sus errores (y presta atención a las reglas para sobrevivir una película de terror). Este tipo de personaje no es muy común en las películas del género slasher, un detalle que se nota más cuando uno se fija en el resto de los personajes de este filme. Tanto Skeet Ulrich como Matthew Lillard interpretan a los personajes de Billy Loomis y Stu Macher de una manera tan exagerada que parece que salieron de un episodio de SCOOBY-DOO. Rose McGowan no sobreactúa tanto dándole vida a Tatum Riley, pero tampoco sobresale como los demás ya que se trata de un personaje superficial y que parece que solo está ahí como relleno. En cuanto a Courteney Cox como Gale Weathers y David Arquette como Dewey Riley, ellos se mantienen entre los dos extremos ya que le dan vida a personajes que fácilmente pudieron convertirse en caricaturas pero se salvan por la carisma de los actores y la química que existe entre ellos.
El impacto de este filme en el mundo del entretenimiento es innegable ya que no solo dio origen a un nuevo villano del cine, sino que también fue la primera entrega de una franquicia que cuenta con varias secuelas y una serie de televisión. Asimismo, tampoco se puede dejar de mencionar que la primera película de la saga de SCARY MOVIE fue una parodia de esta producción, así que se puede contar como otra franquicia que inició gracias al genio de Wes Craven.
De todas formas, SCREAM sigue siendo una opción ideal para cualquiera que esté interesado en ver una película slasher con un buen misterio, violentas escenas de acción, un divertido manejo del suspenso y personajes inolvidables.