Hay películas que no dejó de ver por lo menos una vez al año, especialmente si están relacionadas a una época especial o un día festivo como Halloween. Entre mis filmes favoritos para celebrar la Noche de Brujas nunca falta este clásico de Tim Burton: SLEEPY HOLLOW, una escalofriante y divertida aventura que se disfruta mucho más si se ve de noche y con todas las luces apagadas.
El año es 1799 e Ichabod Crane, un alguacil de la ciudad de Nueva York, es enviado por sus superiores al pequeño y remoto pueblo de Sleepy Hollow donde un asesino en serie decapita sus víctimas y todos creen en la leyenda del Jinete sin Cabeza. Mientras más avanza su investigación Crane descubre que no todo es lo que parece y que algunas leyendas son reales.
Basado en «The Legend of Sleepy Hollow» del autor Washington Irving, este filme surge al final de quizás la etapa más creativa de Tim Burton, es decir, justo después de películas como ED WOOD, BATMAN RETURNS y EDWARD SCISSORHANDS y antes de PLANET OF THE APES. Aquí Burton aprovecha cada elemento y detalle para contar una gran historia y lo hace con el apoyo de un grupo de artistas que dan lo mejor de sí mismos parar crear una excelente película. Esto lo podemos notar, por ejemplo, con Johnny Depp quien basó su interpretación de Ichabod Crane en las actuaciones de Roddy McDowall en FRIGHT NIGHT, Angela Lansbury en THE MIRROR CRACK’D y Basil Rathbone en THE ADVENTURES OF SHERLOCK HOLMES, entre otros. La actuación de Depp se siente genuina, entretiene y logra que el espectador establezca una conexión emocional con el personaje.
Asimismo, esta película cuenta con un ejemplar elenco de grandes actores, como Christopher Lee, Christopher Walken, Ian McDiarmid, Michael Gambon, Miranda Richardson, Michael Gough y Richard Griffiths. Cada miembro del elenco hace un gran trabajo con su papel, excepto por Christina Ricci, quien no está mal, pero en comparación con los demás su actuación es muy simple y se siente fuera de lugar. Además, no hay química entre su personaje y el de Depp.
El guión fue escrito por Kevin Yagher y Andrew Kevin Walker, quienes hicieron un excepcional adaptación del libro de Irving. Ellos logran mantener la esencia y los más importantes detalles de la obra original a la vez que agregan nuevos elementos que enriquecen la historia. Muchos de estos cambios surgen del deseo de Burton de rendir tributo a las películas de terror del cineasta italiano Mario Brava y la compañía cinematográfica conocida como Hammer Productions. Por eso se ven cambios como un Ichabod Crane que es un alguacil en vez de un profesor y que la trama del filme contenga una mezcla de características de los géneros del horror, la aventura, la fantasía y el misterio. El guión también hace un buen trabajo con el desarrollo del misterio principal y las distintas subtramas sin ignorar la evolución de sus personajes y la inclusión de diálogos que están muy bien elaborados.
Por cierto, no puedo dejar de mencionar que Burton incluyó escenas que rinden tributo a THE ADVENTURES OF ICHABOD AND MR. TOAD, una producción animada de Walt Disney que incluye una adaptación de la obra de Washington Irving y que muestra una increíble y espeluznante interpretación de la frenética persecución entre Crane y el Jinete sin Cabeza.
La banda sonora y musicalización del filme estuvo a cargo de Danny Elfman, otro usual colaborador de Burton cuyo trabajo le da el toque perfecto a cada momento, desde los instantes jocosos, situaciones llenas de tensión y hasta los momentos de puro terror. Se puede decir que la música es otro personaje del filme, pero es uno que está ahí para apoyar el desenvolvimiento de la historia, no para distraer al espectador de lo que ocurre en la pantalla.
El director de fotografía de SLEEPY HOLLOW fue Emmanuel Lubezki, alias “El Chivo”, caballero quien también estuvo a cargo de la fotografía de filmes como GRAVITY, THE REVENANT y BIRDMAN. Por cierto, es la única persona que ha ganado el Óscar por Mejor Fotografía tres años de seguido gracias a su labor en esas tres producciones. Aquí el Chivo demuestra una vez más como es capaz de hacer magia con su lente gracias a imágenes que no solo parecen obra de artes que le dan un estilo visual único a la película, también ayudan a resaltar los elementos más importantes de cada escena.
Si tuviera que criticar algo del filme es que a pesar de tener mucha sangre y violencia, la versión animada de Disney aún me causa más miedo y ansiedad gracias a la excelente secuencia de Crane huyendo del Jinete. Fuera de eso, Burton y sus secuaces convierten cada elemento de este filme en otra herramienta que sirve para engrandecer la historia y el producto final no solo es otra gran obra Tim Burton, también es una excelente opción para lo que decidan celebrar la Noche de Halloween quedándose en casa y viendo una película de horror.